Vivir en un ático es el sueño de muchas personas aunque no todo es bonito. De hecho existen muchas razones que conviene contemplar antes de adquirir una vivienda de este tipo.
Podemos pensar que vivir en un ático solo tiene ventajas como poder tener luz natural fácilmente, evitar los molestos ruidos de la calle y disponer de un espacio al aire libre cuando quieras, pero también tiene sus cosas malas como una mayor exposición a las humedades durante la temporada de lluvias. Mayor exponencia al sol hace que tengamos que soportar una mayor temperatura, por lo que tenemos que contar con este aspecto durante los meses de verano y adecuar sistemas que nos permitan regular el frío o el calor en el resto de la vivienda.
Para disfrutar adecuadamente de un ático y poder hacerlo durante todo el año, lo mejor es instalar un cerramiento. De esta manera no limitaremos el uso de nuestras terrazas o solarium al verano, sino que lo podremos hacer durante todo el año.
Para seleccionar adecuadamente cerramientos tenemos que prestar atención a los siguientes aspectos:
- La instalación del cerramiento y de todas las ventanas de un ático debe ser hermética. Así evitaremos la transferencia de temperatura desde el interior hacia el exterior de la vivienda. Esto es muy importante durante el verano, ya que nos puede hacer perder mucho dinero por pérdidas de frigorías.
- Cuidar el aislamiento acústico que nos ofrecen los diferentes cerramientos. Para conseguir todo ello, lo mejor es que escojamos adecuadamente el tipo de cerramiento que vamos a querer en nuestro ático.
Los más habituales son los siguientes:
- Cerramientos completos con techos.
- Ventanas correderas.
- Cerramientos plegables.
- Cortinas de cristal.
- Cerramientos deslizantes.
- Puertas correderas de cristal.