La domótica son aquellos sistemas que son capaces de dotar de automatismos a una vivienda y cuyas ventajas abarcan desde términos de la eficiencia energética hasta las comunicaciones, pasando por la seguridad.

Si eres una de las personas que se preguntan si es buena idea invertir o no en la automatización en el hogar, obteniendo así una vivienda inteligente, te explicamos las diferentes características relacionadas con la domótica en casa y que pueden resultar clave a la hora de tomar una decisión.

Utilidad de la domótica en los hogares

La base de la domótica son los sistemas automatizados e inteligentes dentro de las viviendas, y que puede aplicarse en bloques de edificios, oficinas o fábricas. Algunas de las funciones pensadas para el hogar destacan el control de la climatización durante los diferentes meses del año, el riego del jardín o la detección de entradas indebidas al domicilio. Así mismo, estos avances tecnológicos cada vez son más eficaces en cuestión de mantenimiento y rentabilidad.

Aunque el precio inicial pueda parecer elevado, lo verdaderamente importante será el la inversión final, que dependerá de los objetivos y funciones que quieras controlar, de las dimensiones de la vivienda, de si se trata de una obra nueva o de si hay que realizar modificaciones en la vivienda. El ahorro económico y la comodidad son consideraciones que proporcionará en el futuro rentabilidad.

Las 6 ventajas de las viviendas inteligentes

1. Mayor eficiencia energética. Si compensamos la luz y regulamos automáticamente los elementos de climatización conseguremos un uso más racional de la energía al programar todos los aparatos para que sólo funcionen cuando sea estrictamente necesario. Conseguimos de este modo un importante ahorro económico en las facturas energéticas.
2. Respeto por el medioambiente. Automatizando los aparatos a la hora de dormir para que se apaguen todas las luces del hogar y aclimatando las diferentes estancias de forma óptima reducirás notablemente el impacto medioambiental. De este modo lograremos un mayor respeto con el medioambiente alcanzando una reducción de hasta un 80% en el consumo de suministros. Así mismo, una vivienda más eficiente adquirirá un mayor valor de mercado, revalorizándose considerablemente.
3. Control de las aperturas y cierres. Accesos sin llaves y monitorizaciones relacionadas con la seguridad, la iluminación inteligente del inmueble y la regulación lumínica en la apertura y cierre de las persianas de una vivienda, son algunos de los múltiples beneficios y posibilidades que ofrecen los sistemas domóticos.
4. Mejorar la seguridad. Uno de los punto a tener más en cuenta es que hay muchas funciones capaces de aportar mayor seguridad al hogar: sensores de ruido, de movilidad, de objetos extraños o de detección de incidencias como, por ejemplo, una posible inundación antes de mayores consecuencias. Y, por supuesto, permite la vigilancia automática capaz de detectar posibles hurtos u ocupaciones.
5. Ayuda a personas mayores con la teleasistencia domótica. Las personar que precisen de ayuda, como enfermos crónicos, se podrán beneficiar del control de su entorno de forma intuitiva, sencilla y remota, ya que la domótica es capaz de permitir una atención personalizada para los usuarios. Esto se efectúa mediante un control manual del servicio, o un dispositivo digital, programando sistemas de control de voz o corporales para cumplir labores de ayuda.
6. El IoT (Internet de las Cosas) y la domótica. Esta combinación consigue interconectar digitalmente elementos cotidianos con internet. La domótica vuelve a mostrar su flexibilidad a la hora de integrarse en la cotidianidad y funcionalidad de una vivienda. ¿Sinónimo de ello? Una climatización que puede activarse antes de llegar a casa

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